¿En qué situación preferiría trabajar?
La mayoría de la gente preferiría trabajar en un entorno limpio donde el cuerpo, la ropa y el ambiente permanezcan limpios y no sea necesario llevar ningún equipo de protección individual.
Trabajar en nubes de polvo también aumenta el riesgo de daños debido a la visibilidad reducida y puede distraer a los empleados por irritaciones en los ojos, estornudos, toses o sonarse la nariz. Pero este no es el único motivo para hacer frente al polvo. Puede aumentar su productividad considerablemente y reducir los costes de mantenimiento con las siguientes medidas contra el polvo:
- Reduciendo el tiempo de preparación: no se pierde apenas tiempo acordonando el área requerida antes de comentar el trabajo
- Reduciendo la limpieza: dependiendo de la aplicación puede ahorrar hasta un 99 % el tiempo de limpieza
- Reduciendo daños de accesorios: como alfombras, muebles y otro mobiliario
- Aumentando la vida útil de las herramientas: hasta un 60 % y de las piezas insertables hasta un 20 %
- Incremento de la velocidad de aplicación: hasta un 20 % con herramientas más limpias y afiladas.
Es evidente que el polvo es un problema que el sector de la construcción debe afrontar.